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Texto para presentaciones en
directo
en contextos de humor.
Pablo Albo es uno de los mejores narradores de
la esfera nacional…
¿Qué digo uno de los mejores? ¡El mejor narrador de la esfera
nacional
¿qué digo nacional? ¡Internacional!
Que ha contado cuentos en trece países, algunos tan lejanos como
Australia, México o Brasil
y en ciudades como Londres, París, Estrasburgo, Sídney, Melbourne,
Dublín…
O sea que el mejor narrador de la esfera mundial…
universal podríamos decir tirando por lo bajo
En la actualidad nadie cuenta los cuentos ni la mitad de bien que
él…
Ni en la actualidad ni a lo largo de la historia…
ni se piensa que nadie lo haga tan bien en el futuro.
No solo eso es limpio, decente, buena persona, a la vista está que
tiene un gran atractivo personal tanto en su apariencia física como
en su interior humano…
Amigo de sus amigos, vecino de sus vecinos, amante de sus amantes…
Gran cocinero, también.
Hace una paella que te mueres.
Nunca pruebes su paella porque… te mueres, jaja.
No solo eso, además es que escribe de maravilla. Tiene publicados
cincuenta y pico libros infantiles, que hay cierto consenso en que
son las cincuenta y pico obras cumbres de la literatura infantil de
todos los tiempos.
Por la que ha recibido importantes galardones como el prestigioso
Lazarillo en dos ocasiones y menciones internacionales de Alemania o
Estados Unidos.
También es formador. Su escuela efímera de narración oral NARRATIO
reúne en enero-febrero cada año a las mejores personas que se
interesan por iniciarse en la narración oral o en la escritura de
cuentos infantiles. Único centro formativo que incluye jacuzzi con
la matrícula.
Como ven una breve síntesis de sus bondades sería más larga que el
propio acto que nos ocupa, así que no me enrollo más.
Déjenme decir que si tuviéramos que quedarnos con solo una de sus
cualidades sería sin duda:
La modestia
Sin más dilación, recibamos ya con un fuerte aplauso a
¡PABLO ALBO!
Biografía
un poco más seria.
Pablo
Albo es cuentista de profesión. Nació en Alicante en 1971 y fue al
colegio como todos los niños de su barrio. Todo iba bien hasta que
ganó el concurso de relatos de su clase y ya no pudo ser una persona
normal. Trató de huir del arte y la farándula estudiando Trabajo
Social pero, aunque se matriculó, no llegó a ejercer porque se
embarcó en el grupo de narración oral Albo y empezó a recorrer las
Españas contando historias.
Hoy, en solitario, sigue con lo mismo, narrando a personas de muchas
edades. Por todo el mundo (que ha estado en Cuba, Suiza, Italia,
Grecia, Australia, Brasil, México, Venezuela, Bélgica, Colombia,
Francia, Portugal, Irlanda, Reino Unido).
Y como las historias que cuenta, son de su autoría, a veces terminan
en libros. Cincuenta y pico tiene ya publicados. En muchas lenguas
se le puede leer (o tocar que también está en Braille): Chino,
coreano, árabe, alemán, euskera… así hasta trece. Ah, y no lo debe
hacer muy mal, porque le han dado premios y todo: El prestigioso
Lazarillo en dos ocasiones, mención The White Ravens de Alemania en
cinco ocasiones, Junior Library Guild de Estados Unidos en una,
Fundación Cuatro Gatos de Miami en otra y otras muchas distinciones.
Es simpático. Cuando no lleva bigote, un poco guapo. Y aunque nació
en Alicante, a la orilla del Mediterráneo, ahora vive en el Albacete
de La Mancha de Don Quijote. Aunque para poco en casa. Anda siempre
de acá para allá por las carreteras con la vista puesta en el
horizonte y rumiando entre dientes las palabras de su próxima
historia.
Minibiografía 1.
Pablo Albo contó cuentos por primera vez en
1994, en Alicante, su tierra natal. Narrando en bibliotecas, teatros
y festivales ha visitado casi todas las provincias de aquí y también
frecuenta el extranjero.
Cuenta para todo tipo de público. Sabe que los cuentos no tienen
edad, pero que cada edad tiene sus cuentos y los elije con cuidado y
luego los cuenta con su voz, con sus manos, con su cuerpo, sus
gestos y con su mirada. Las palabras no necesitan nada más.
También los escribe. Ya van por el mundo cincuenta y pico libros
suyos y otros tantos que esperan. Traducidos a trece lenguas y
algunos con importantes reconocimientos y todo.
Tiene una escuela efímera de narración oral que se llama Narratio.
En enero y febrero hace cursos para ayudar a padres y madres a darse
cuenta de que llevan un narrador dentro o a personas que quieren
acercarse a la escena.
En fin cuentos, cuentos y cuentos.
Minibiografía
2.
Pablo Albo es sobre todo
una persona humana con la cabeza llena de historias. Es pícaro,
socarrón, irreverente, vulnerable, ácido, ágil, delgado, inmenso,
bello, dulce, introvertido, echado 'p´adelante', despistado,
preciso, loco, tierno y una carretada interminable de adjetivos
calificativos, porque Pablo Albo es sobre todo incalificable. Da
igual lo que cuente de él. Incluso da igual lo que él mismo cuente
de sí o del mundo. La seducción es inmediata: que cuente lo que
quiera, yo me dejo. Me rindo incondicionalmente. Y es que es para
oírlo. Prepárense a llorar de risa y de emoción. Sus historias dejan
surco en el alma.
Virginia Imaz
Revista ARTEZ.
Febrero 2008.
Suplemento "Cuenta con Agüimes"
Minibiografía 3.
Pablo Albo nació en Alicante a la orilla de la
mar mediterránea. Ya de niño tenía la mirada perdida como si acabara
de recibir una pedrada o como si anduviera siempre pensando en sus
cosas. De joven igual. No es que fuera despistado, aunque lo
pareciere, es que andaba fabulando. Le puso tanto empeño que hoy por
hoy no sabe hacer otra cosa: Inventar historias y contarlas de viva
voz o por escrito. A eso se dedica. Todos los días se levanta,
friega lo quedó de la cena de anoche, hace la cama, barre las
pelusas del pasillo, da de comer a su perra Boira, le cambia el agua
y se pone a fabular, sentado frente al escritorio o paseando por
Albacete a donde le llevó un amor o sentando frente a ese mar azul
tranquilo de Alicante que cuando nadie mira le dicta las mejores
historias al oído.
Reseña aparecida en el libro Los
colores del miedo.
Editorial Palabras del candil, 2009
Minibiografía 4.
Pablo Albo cuenta cuentos a personas de todas
las edades: Niños y niñas con y sin barba, jóvenes cansados de ser
maduros, personas pretendidamente adultas y ancianos que no saben
que lo son. También a madres y padres que llevan a sus hijos como
excusa para escuchar los cuentos.
Para todos lo mismo: palabras. Simplemente palabras. Nada menos.
Cuando empezó a hacerlo no imaginaba que ese vicio se convertiría en
su profesión ni que le llevaría a viajar a tantos sitios y conocer
tantos rincones de las ciudades y de las personas.
Minibiografía 5.
Pablo Albo nació en
Alicante hace algún tiempo. Es cuentista porque todo el rato lleva
un cuento en la cabeza. O más. Piensa en ellos. Se le salen de la
boca. Se le ponen en el papel mientras él trata de acercarse a sus
secretos. Algunos cuentos suyos los pusieron en libros para que
viajaran solos. Ha contado cuentos a personas de todos los tamaños
en casi todos los rincones del país que habita y de otros muchos.
Desde 1994 entrega palabras a gentes de todas las edades mientras
les mira a los ojos.
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