Cuando me levanté al día
siguiente,
mi abuelo estaba haciendo una cometa.
—También necesitamos harina.
Eso ya es más complicado.
Para conseguirla hay que tener trigo y
un molino movido por el viento.
«Trigo, tengo. Molinos, alguno queda.
Pero el viento cada día está
más viejo y perezoso»... |